viernes, 24 de marzo de 2017

Concurso Nacional de Poesía Joven "Rafael Cadenas"




…Cuando comencé a leer los poemas que los organizadores del Premio Rafael Cadenas nos iban enviando, me di cuenta de que estaba leyendo “el alma” del país. Lo más inquietante era la edad de los que habían enviado al concurso, dadas sus bases: jóvenes hasta 35 años. Recibimos casi 600 poemas de todos los estados, o de casi todos. Y mientras iba leyendo era evidente que ese otro país que decía no reconocer en su durísimo reclamo, se había hecho presente, las más de las veces de una manera consciente y dolorosa. (…)

No puedo imaginar para un escritor, sea poeta o ensayista o narrador, una tarea más difícil que recoger los pedazos que hemos ido dejando y que refuerza la idea del poema como pregunta: ¿Qué es esto que está aquí? “Si sabe el poeta de recoger las piezas”, se llama uno de los poemas que van a leer. En todo caso la pregunta es muy inquietante –qué es esto que está aquí-, porque abre una brecha tremenda entre ellos, los muchachos y nosotros “los mayores”, como decía Fina García Marruz en aquel poema memorable. (…)

No es un detalle que el concurso que convocó este premio lleve el nombre de Rafael Cadenas. No porque Rafael sea el mayor poeta vivo venezolano y uno de los mayores poetas vivos en lengua española, sino por lo que significa para Cadenas la poesía, cómo vive él la poesía, cómo es su relación con el tiempo y, por lo mismo, con el lenguaje que expresa la poesía. (…)

Lo he dicho muchas veces, para mí la poesía tiene por encima de otros valores, incluido el literario, el valor del testimonio humano: lo que pensó, y escribió una persona en determinado momento. Como testigo de su tiempo, el poeta es alguien que está mirando, decía Seamus Heaney, desde un lugar con vista de 360°. En lo alto de sus atalayas, los poetas son lectores privilegiados y de ese don también son responsables.

Yolanda Pantin

Aquí compartimos algunos de los 27 poemas seleccionados en esta primera edición del Concurso Nacional de poesía joven Rafael Cadenas, iniciativa de @autoresVzlanos y el @teampoetero.


A mí la locura
me viene de mi madre
que rezaba luciérnagas
en medio de lo oscuro
para darnos un universo inédito,
y sin embrago antiguo

Zurcía con barro y perfume de especias
el fisurado hueso del coraje,
por eso hay gotas de cielo
corriendo cual niños ensimismados
por los altos aires del deseo.

Júbilo eran sus cantos
lloviendo pájaros de amores
que nunca en la vida.
Porque antes de ser mujer y madre
era loca, loquísima,
no como Juana
ni Luz Caraballo,
la locura de mi madre
era un relámpago ebrio
desbordado sobre el pecho virgen
de mis hermanos y yo.

Mi madre era una verbena
amainando lágrimas
de niño Jesús tardío.

Alrededor del abuelo José Isabel, su padre,
que mascaba chimó mientras nos contaba sus amores
imposibles con Susana Dujim

y el fantasma de lirios insaciables de la abuela Ana Rosa
María, la paterna,
se burlaba dela mentira más hermosa del mundo.

Papá bailaba al son de esos alaridos elefantes
y boleros de Olga, la Guillot,
a quien encendía velas
para librarnos del silencio de los cielos,
cuando el destino apretada el cinturón de pelas milenarias,
y el arroz con leche de Fabiana, mi madre.
Nos daba el sana sana culito de rana por las tardes
como un salmo al viento,
nunca escrito,
por algún santo,
jamás.

Yorgenis Ramírez



La negritud de un lejano caballo ha traspasado mi temblor nocturno
he sostenido mi espinazo apenas con la soga de un corroído recuerdo
el sueño se erige sobre mis ojos como un oráculo de muerte
mi rostro huye
le he tramado una terrible artimaña
he tocado el hueso del grito
y heme aquí lavando mis senos con el agua turbia de la boca de los lobos
Arrastro mi desespero mi desconocimiento
estoy en el umbral de una tentadora puerta
me hallo ante el túmulo de luz salvaje
me prometo habitar las carnes rotas
me prometo el cuerpo
me prometo abrir la cáscara andrógina

            ser mujer-hombre 
lamer y lacerar un solo vientre. Ser mi hija y mi madre
 parir entre el moho relucientes cabezas y olvidarlas.
Olvidarme
Habitarme de forma absoluta y luego y arrojarme de mi misma.

Me espanta esta hambre y esta carencia
y me encanta no sentirla cada día.
El tiempo fue tiempo hasta que se detuvo ante mi sexo.
La soga está frágil
hay dientes, cuchillos y garras devorando parajes y cielos,
la soga está frágil y ya no quiero sostenerla.
Duele, duele el retorno
mi cuerpo se inmola, se desgaja, se lacera.
La soga está rota,
las ruinas laten sobre el sol.

Diana Moncada


Shemá PARA MÍ MISMO


Escucha, recuerda Israel,
cuando han halagado tus ojos tristes inquisidores
y en el exilio de la memoria un encanto
ha dicho tu nombre.
Escucha, recuerda Israel,
que tal vez no seas la más virtuosa
ni las más brillante de las naciones
pero sí la primera en abrazar el pacto.
Que no debes temer ahora a la soledad
ni al silencio,
ni dejarte vencer por el hastío
porque la virtud crece con la renuncia.
Escucha, recuerda Israel,
que llevas contigo tu patria
aunque te sientas extranjero
Si lloras al sol del mediodía
Aunque la costumbre dicte no llorar nunca,
Si te acongoja que alguien te corresponda
Aunque nunca piense en ti como tú en él,
Si te sientes en muerte
Cuando los demás viven la vida,
Si cuando vives la vida
Más te expones a la muerte
Y tienes que seguir, aunque duela.
Hay un estado de gracia
En ser un desdichado,
En ser el último país de la Tierra
y acaparar los mimos de la soledad
Y los fantasmas del silencio
Y dar las gracias a pesar de todo.
Escucha, recuerda Israel,
Cuando el innombrado te ordenó
Hacerte un templo
En Jerusalén
Para tus tragedias,
para tus holocaustos,
para las ceremonias de la cosecha y la vendimia,
para tus pequeñas alegrías,
para cantar elegías.
Pero destruyeron el templo
Las hordas de los romanos
Y tuviste que hacerte templo:
llevar el templo adentro
Para las tragedias
Para los holocaustos,
Para lo que te delata como tonto,
Para las alegrías, aunque pocas,
Y para cantar el dolor callando.
Escucha con la mente y las vísceras, Israel.
Medita en estas palabras
Y guárdalas en tu corazón
Para que no se disipen:
No salves a quien no merece ser salvado
No quieras a quien diciendo
Quererte no se arrepiente de sus pasiones;
Alimenta tu coraje, confía en tu suspicacia,
No dejes entrar al templo a quien no
Se ha hecho templo
Y no se conoce a sí mismo
Porque tiembla ante la soledad
Y teme al silencio.
Vístelas como tus hábitos.
Átalas como tu nombre al pensamiento.
Cóselas en tus manos
Y confía su peso a tu corazón
Porque ellas te augurarán
Cántaros de paz y de harto regocijo.
No hay más que hacerse templo:
Para la concentración y el gusto por la soledad,
Para el equilibrio de los humores,
Para beber las mieles del amor,
Para conseguir perdonarse por persistir
En tanto desgraciado desamor propio.
Hacerse templo.
Pero si no lo hicieras,
Si en un arrebato de obstinación
Y de arrogancia
Quisieras desentenderse de la alianza
Y desistir de la libertad
De hacer el mundo
Y salvar a quienes no merecen ser salvados a pesar de todo,
Recuerda,
Bueno es que sepas, Israel,
Que el cielo se cerrará sobre ti
Y derramará un diluvio de pesadumbre
Y no habrá refugio para ti
(adentro)
En el templo:
El viento del desierto calcinará tus huesos
Mojados en el salitre de la Gehena
Y arrecian la sequía
Para como si jamás hubiera tu retina
Sido tocada por la luz de la mañana
Trasnportarte a una oscuridad eterna
Sin estrellas
Y hacerte polvo.

Benjamin Mago




EL ASALTANTE

Un sendero de humo
cubre el cuello
del amante

su ejercicio
pasajera paciencia

ir y venir
sobre el columpio
que empuja Dios
hacia la salida
dela calle

su clamor
pedir un segundo
más de la compañía
entre la vida y la muerte.

Robert Rincón




MAR BÁLTICO


La sequía me persigue. Mi cuerpo de neonata no expuesta
a la divinidad navega en la balsa de mi padre . Hay una
manta que cubre el rostro leve, su olor salitre me sabe
maldita y arde, mi cara se incendia y me preguntas por
qué nací tan enferma. La sequía me persigue, mi padre ha
olvidado al diminuto cuerpo bajo el sol del caribe, navego
como un espejismo del trópico huérfano de noche. Padre,
he recolectado estos caracoles para ti. Padre,  he escrito
un poema para después de tu muerte, lo murmuro desde
esta balsa que es débil y me tiembla, lo murmuro para que
tu cuerpo inmóvil emerja.  Te ha llevado un mar oscuro
mientras solo juntaba mis manos lejos de casa. Eres ceniza
que no es mía ni de dios. Espárcete sobre este cuerpo
moribundo y diáfano, sopla la sal de mi pequeño pecho
enceguecido y dale a tu hija descanso eterno. Al final
siempre regreso hacia la sombra, esta balsa que habito se
ha detenido ante la especie. Si vine de tan lejos fue para
susurrar al triste animal del báltico sobre lo fácil que es
hundirse. Mis manos gélidas intentan aplaudir en el vacío. 
Nadie va a salvarnos cuando los muertos florezcan como
bacterias en lo ojos. Nadie va a salvarnos. He venido de
tan lejos y no se escuchan más que el hambre mientras te veo
nadar de espalda sin ahogarte. Nunca hubo más peso que
mis huesos en esta balsa. Nunca nadie, nunca. Apenas la
brisa seca del báltico tropezando con mi rostro en la última
señal de la cruz.

Nazareth Romero


TREINTA

Tengo treinta años y soy tan sensible como un niño solo.

Me he desnudado en la calle,
para dejar brotar un caudal de pena.
Me he detenido frente al dolor,
y con mis palabras he intentado sujetarlo,
pero resbalaron sus aceitosos costados.
¡Dolor cuánto te temo, cuánto te llevo,
aquí dentro, cabalgando con la sonrisa!
Te llevo espacio frío, en la oscuridad, en la sombra.

Tengo treinta años y sólo sé huir,
sólo sé escabullirme entre las líneas,
solo sé dibujarme de pie,
con la mirada perdida y el corazón en la manos.
Soy entonces esos ojos en los que rebotan las miradas,
sólo sé confundirme entre la gente,
y jugar a que sé quién soy,
jugar a que conmigo misma soy feliz.

Tengo treinta años y me duele la cabeza
Me martilla la palabra,
que me labra, que me labra,
me vuelve sola una estrella infinita.

Usaré entonces esa pala de la palabra,
y labraré mi vida entre sus manos.

Betina Barrios 



jueves, 16 de marzo de 2017

Cristina Peri Rossi / Playstation


Cristina Peri Rossi obtuvo, en el 2009 con Playstation, el XXI Premio Internacional de Poesía de la Fundación Loewe, siendo la primera mujer en recibirlo. Aquí presentamos una breve selección. (7 poemas)








FIDELIDAD



A los veinte años, en Montevideo, escuchaba a Mina

cantando Margherita de Cocciante

en la pantalla blanca y negra de la Rai

junto a la mujer que amaba

y me emocionaba



A los cuarenta años escuchaba a Mina

cantando Marguerita de Cocciante

en el reproductor de cassettes

junto a la mujer que amaba,

en Estocolmo

y me emocionaba



A los sesenta años, escucho a Mina

cantando Marguerita de Cocciante

en Youtube, junto a la mujer que amo,

ciudad de Barcelona

y me emociono



Luego dicen que no soy una persona fiel.






ANOCHE TUVE UN SUEÑO



Anoche soñé que hacía el amor con mi madre

mejor dicho

no conseguía hacer el amor con mi madre

porque siempre venía alguien a interrumpirme

con alguna tontería



mi madre estaba desnuda

y era muy guapa

siempre ha sido muy guapa

hasta en la vejez



debía de tener veintiséis años

la edad que tenía cuando yo nací



y estaba desnuda

completamente desnuda



me gustaba mucho mi madre

pero siempre aparecía alguien

dispuesto a interrumpir

así que yo me demoraba



No se lo contaré al psicoanalista

me dirá que esa no era mi madre

a pesar de tener la apariencia de mi madre



a los psicoanalistas les gusta mucho

que las cosas no sean lo que son

les pagan por eso.



II



Igual al otro día fui al psicoanalista

y le conté un sueño

le conté que me acostaba con una mujer

joven

más joven que yo

tenía veintiséis años

entonces el psicoanalista

me dijo que esa mujer no era otra mujer

como yo creía en el sueño

en realidad –dijo-

la mujer con la que soñó que se acostaba

era su madre.



III



Me pasé un mes

preguntándole a toda clase de personas

-hombres y mujeres-

si habían soñado que se acostaban con sus madres

y ellos

-hombres y mujeres-

me decían que no

que de ninguna manera

ellos y ellas no soñarían con esas porquerías



-una sucia cosa de esas-



hasta que me di cuenta

de que no tenían madres guapas.






BIBLIOTECA



Me pregunta con mucho interés

qué he hecho con mi antigua biblioteca

de ocho mil volúmenes



No hay nada que me parezca más caduco

que la fotografía de un viejo escritor

o de una vieja escritora

rodeados de sus libros

como un ejército de guardaespaldas.



Los regalé –le digo.



¿Y no los añoras? –pregunta.



Me gusta amarlos a la distancia

-contesto-

para no decepcionarme.






ESPEJOS CIRCULARES



Una vez me tradujo al francés

un ingeniero forestal

que plantaba encinas

en Catalunya



era joven



estaba enamorado



repoblaba de árboles

un bosque quemado



me dijo que cada árbol

era una palabra



un trozo de papel



le traducía mi libro

a su amada

para enamorarla



la traducción me gustó



era la mejor que había leído



“el libro dice lo que yo quiero decirle”



me escribió



(no existía Internet)



Al final la enamoró

publicaron la traducción

la mejor que yo había leído



Nos tomamos un café en el viejo Zurich



de la plaza Catalunya



era joven

era guapo

era dulce

y no conocía



el Infierno de Dante:



Paolo y Francesca

-cuñados-

leen juntos los amores adúlteros

de Lancelot y la princesa Ginebra



“cuando Lancelot besó sus labios,

éste, que siempre me acompaña,

besó los míos y

es tarde, ya no leímos más”



Después se casó

tuvo un hijo

y ya no me tradujo más.

Había entrado en el infierno.




ADVENIMIENTO



Después me tradujo

una americana

de Washington

nacida en Montevideo



hablaba el mejor inglés

desde la época de Shakespeare



pero no encontraba la palabra

justa

para traducir “advenediza”



Tradujo I am the outsider



y yo que no sé inglés

no lo acepté



cómo mierda querés



que traduzca advenediza



me dijo por teléfono



un teléfono intervenido

por su marido

-experto en telecomunicaciones-

que sospechaba que éramos amantes



con todo fundamento

aunque ella se dejara matar

antes de admitirlo



Advenediza es una hermosa palabra,

le dije,

viene de advenir,

del advenimiento de la Virgen María,

desde cuándo sos católica

me replicó



aún así

aunque no soy católica ni apostólica

ni romana



la palabra advenediza

es una palabra hermosa



más allá de lo que significa



y la traducción que hizo

ganó un premio importante en USA



el Award Prize of Book



que no nos dio ningún dinero



pero nos invitaron a Princeton



donde ella se emborrachó

contemplando las fotografías

en la pared

de las viejas promociones de estudiantes

donde estaba la del padre de John

su marido



es raro ver llorar a la mujer que uno ama

mirando la foto antigua de su suegro

me parece que me puse un poco celosa



y ella un poco borracha



“Creo que voy a llamar a John

a contarle que encontré la foto de su padre

en Princeton”



me dijo







yo no supe si el whisky la había enternecido

o era que quería despistar a su marido



así que no dije nada



nada de nada

y me tragué el whisky.



Nos dieron el premio

nos hicieron entrevistas

aunque no nos dieron dinero

que era lo que me importaba



ella regresó a Washington

yo me emborraché en el avión



y luego nos separamos

sin encontrar la palabra justa en inglés

para traducir advenediza.




ANIVERSARIO



Hoy se cumplen cinco años de la invasión de Irak

y Bush ha dicho que la guerra ha sido un éxito



los periódicos se toman a mal

las declaraciones de Bush



¿Qué quieren que les diga a las madres de los soldados

muertos? ¿Qué quieren que les diga a los lisiados,

a los que se han vuelto locos, a los que tienen esquirlas

en el cuerpo? ¿Qué fue un error?



Si hemos de morir

mejor que no sea a causa de un error.

Y aún peor, un error de otros.




EPITAFIOS



Un editor me pide

que escriba gratis mi epitafio

Prepara un libro con epitafios

de varios autores vivos



-qué idea más macabra

debe de habérsela copiado

a un editor anglosajón-



Seguramente el editor no sabe

que hace veinte días

me atropelló un auto

y estoy postrada

la pierna derecha en alto

una fractura

un hematoma interno

una quemadura de tercer grado



(el auto no me hubiera dado tiempo

a escribir mi epitafio)



Rechazo la idea



pero al cabo de un tiempo me hace gracia



así que le envío un email

con mi epitafio

“Si no pedí que me trajeran

¿por qué me echan?”




I LOVE CRISTINA PERI ROSSI



En el portal de Amazon

aparece mi nombre



al lado de Michael Jakson

Madonna y George Clooney



venden camisetas en tres tallas

(pequeña mediana mayor)

para hombres mujeres niños o niñas





las camisetas blancas

tienen una inscripción

en letras rojas: I love Michael Jackson

I love Madonna

I love George Clooney

I love Cristina Peri Rossi

mi nombre es más largo

ocupa más espacio



Me pregunto quién habrá tenido

la alocada idea de quererme en camisetas

de Amazon



Sólo me gusta el No llores por mí Argentina

de Madonna

y detesto a George Clooney

(Michael Jackson me da un poco de lástima

tuvo una infancia difícil, como yo)





Al otro día las camisetas siguen allí

en el portal

a quién se le habrá ocurrido

que me ama tanta gente



como no me lo termino de creer





compro un par de camisetas I love

Cristina Peri Rossi





-A ver si haces un poco de dinero

-dice mi amiga- que la literatura

no da para comer

-parece que puede dar para vestirse un poco

pienso



A los quince días llegan por correo

las camisetas I love Cristina Peri Rossi



dos por cincuenta dólares más diez el envío

Pienso que amarme no es tan caro

podría ser mucho peor



Mi abogado dice que es inútil poner una demanda

Amazon no contesta

tiene una respuesta robot para todos igual



no sé a quién regalarle las camisetas



A mí, mi amor me queda grande.




Cristina Peri Rossi nació en Montevideo, Uruguay, en 1941. En 1972 se instaló en Barcelona y adquirió la nacionalidad española